La arquitectura colonial cubana es uno de los mayores atractivos de la isla, sus edificios y calles aportan un carácter propio y único a la isla que la hace reconocible. Cualquiera puede ver una foto de Cuba y sobre todo de su capital La Habana y reconocerla al segundo gracias a sus edificaciones.

Pero el paso del tiempo hace que muchas de ellas, ya centenarias, necesiten de cuidados y tratos especiales para asegurar que continuaran enamorando a los habitantes y visitantes de la isla caribeña. Hay que reforzar sus estructuras y los suelos en los que se levantan, para ello hay que utilizar cimentaciones especiales.

Dentro de estas cimentaciones se encuentran dos tratamientos especializados en las estructuras del suelo, estos son los micropilotes inyectados y las resinas expansivas. Ambos consolidan el suelo asegurando que las estructuras se levantan sobre superficies fijas, evitando así la aparición de grietas en las paredes.

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