Injertos capilares a partir de la madurez

La alopecia androgénica empieza a mostrarse cuando la producción endógena de hormona masculina inicia su ciclo en el cuerpo humano, es decir, en la adolescencia, y la sensibilidad local es una característica hereditaria. Las personas que no tienen esta característica, evidentemente, no pierden folículos de manera visible.

No obstante, con la edad, aparece, la pseudo-alopecia de la madurez, que no es más que una pérdida generalizada de densidad y un retroceso de la línea frontal. Por eso la mejor solución, es someterse a un tratamiento de injertos capilares. 

En la actualidad, dos de las técnicas más avanzadas en injertos capilares, es el implante de pelo mediante folículos, mediante las técnicas FUSS y FUE. La gran ventaja de la técnica FUE es que no deja cicatriz. Ambos procedimientos garantizan que el paciente no sufrirá reacción alérgica o rechazo de su injerto capilar, puesto que el cabello se extrae de zonas del propio donante no afectadas por la alopecia.

Analizando las características de la  alopecia androgénica, se ha avanzado e innovado en la tecnología para normalizar la imagen de la persona y recuperar su línea frontal de una manera absolutamente natural, adaptada a personas de más de sesenta años. Con esta fórmula y realizando injertos capilares en Barcelona, se han conseguido resultados de éxito, incluso con pacientes de más de 80 años.

Por último, ahora que estamos en verano, nos interesamos más por nuestra estética y queremos estar radiantes para disfrutar del sol y hacer grandes viajes como a Cuba, u otros destinos que despiertan la curiosidad por descubrir una nueva cultura. Por eso, es importante realizarse un tratamiento de injertos capilares antes de esta temporada, para poder disfrutar del calor sin tener que cuidar nuestro cuero cabelludo.